Volver, volver, volver

Dicen que cuando la noche es más oscura es porque está a punto de amanecer pero poco se habla de que cuando comienza a amanecer es cuando más frío se siente. 

Después de ti han sido buenos años, te hablo no desde el rencor sino desde el alivio. Admitir que estaba enferma y carcomida por un dolor autoimpuesto fue muy duro. Fue un camino pesado intentar ir por un trecho medio a ciegas y a tumbos.

Te había dado mis mejores versiones y había perdido todo en ese intento. El peligro de las mentiras es que entre más veces las cuentas, más problable es que termines creyendo que son verdad.

La verdad escuece, pero cura. No me dí cuenta cuando pero comencé el camino de regreso a casa, sólo supe que podía volver y que había alguien esperando.

En realidad Él nunca se había ido, todo el tiempo estuvo esperando que yo dejara de confundir los caminos y de contarme historias. Estuvo conmigo las noches más oscuras y las mañanas más frías. 

El dia que volví, lo ví desde lejos y aunque mi vestido estaba manchado de sangre y mi cabello era un desastre, le dio igual, me recibió como si fuera la misma que había visto marcharse llena de sí misma.

Conocerle ha sido una cosa muy buena.

Creo que va a amanecer, la luz empieza a clarear, ya veremos que trae el día.

Deja un comentario