Quiero noches de verano interminables,
Vestiditos de flores y el cabello al viento
Caminatas a oscuras
Y el viento rosándote la espalda.
Las prisas del día están de vacaciones,
las noches no duermen,
Nosotros tampoco.
Escuchar tus zapatos contra el empedrado,
Pasos torpes, la última copa de vino,
Cenas a media luz, risas a toda voz
Música de fondo, en momentos solo susurros
Noches de una extraña secrecia
Nos movemos lentos siguiendo el vaivén de los grillos
Las estrellas ya no nos miran igual, el calor las adormece
ya no nos observan como en primavera,
sus miradas ahora guardan complicidad.
Mismo sitio, distinto lugar
Soñamos con el mar,
Con que el calor nos despierte el cuerpo,
Ya no queda rastro del letargo del invierno.
No todos los veranos son iguales,
ni nosotros somos los mismos cada verano.
Nunca sabes donde puedes terminar… o empezar